El frigorífico-carbonatador es un dispositivo útil e innovador que transforma el agua corriente en agua con gas o carbonatada a voluntad. Muchos de nosotros lo usamos a diario, pero quizás no todos entiendan cómo funciona exactamente. ¿Tienes curiosidad por saberlo? Aquí tienes una guía paso a paso para entender cómo funciona un frigorífico.
¿Qué es un frigorífico?
En primer lugar, ¿qué significa "refrigerador"? Este término deriva de la unión de las palabras “refrigerador” y “carbonatador” e indica un dispositivo que refrigera y carbonata agua. El frigorífico, por tanto, es un dispositivo eléctrico que permite enfriar el agua a una temperatura agradable y añadirle dióxido de carbono, haciéndola espumosa.
¿Cómo funciona un frigorífico?
El frigorífico funciona en dos fases: enfriamiento y carbonatación.
Fase 1: Enfriamiento
El enfriador de agua tiene un compartimento frigorífico que enfría el agua a una temperatura agradable. Esta función es muy similar a la de un frigorífico. El sistema de refrigeración generalmente utiliza el principio de la termodinámica, utilizando el efecto Joule-Thomson, para enfriar el agua que pasa por el dispositivo. Luego el agua se almacena a una temperatura constante.
dentro del carbonatador.
Fase 2: Carbonatación
Una vez enfriada, el agua está lista para la carbonatación. Esta fase se produce cuando el agua entra en contacto con una bombona de dióxido de carbono (CO2) presente en el frigorífico. Al presionar un botón o palanca, el dióxido de carbono se libera del recipiente y se mezcla con agua, creando así agua con gas. El proceso es posible gracias a la presión ejercida, que permite que el gas se disuelva en el agua.
Rellenar la bombona de CO2
Una vez agotado, el cilindro de CO2 se puede reemplazar o rellenar. Muchas neveras portátiles modernas están equipadas con indicadores de nivel de CO2 para facilitar el mantenimiento y garantizar que nunca te quedes sin tus burbujas favoritas.
¿Por qué utilizar un frigorífico?
El uso de una hielera ofrece numerosos beneficios, incluida la conveniencia, la sostenibilidad y la personalización. En comparación con comprar agua con gas embotellada, una hielera reduce significativamente la cantidad de residuos plásticos producidos y el coste a largo plazo. Además, ofrece la posibilidad de ajustar el nivel de carbonatación según tus preferencias.
En conclusión, el frigorífico es un dispositivo sencillo pero ingenioso. Gracias a su funcionamiento es posible transformar agua corriente en agua con gas a voluntad, todo ello ayudando a reducir el impacto medioambiental de los residuos plásticos. ¿A qué esperas para probarlo?